El Polo Norte
Within your heart, keep one still, secret spot where dreams may go.
Louise Driscoll
Estamos tú y yo en medio de una tierra espesa y blanca. Tú y yo en el Polo Norte.
Aquí, en esta inmensidad plateada, finalmente nos hemos vuelto a encontrar. Ah, cuanto tiempo amigo mío.
Firgoff..
Yo muchas veces te había dicho:
- Hasta en el Polo Norte me iría contigo.
Y tus ojos marrones oscuros siempre habían asentido. En el fondo, dónde fuese. Pero juntos. Hasta en el Polo Norte.
Mi buen perro Firgoff... Este mes hace un año justo que te has ido en esta otra dimensión, misteriosa e inaccesible, del otro lado de esta realidad nuestra, y esta dimensión tuya es la misma que hay en mi corazón.
Me has venido a visitar, amigo mío...
Te lo decía muchas veces, esto del Polo Norte. Era una frase secreta entre nosotros, una frase de complicidad, una especie de código. Reíamos en silencio.
Estamos solos...Y el viento del Norte está ausente... No hay ningún sonido aparte el respirar nuestro que se transforma en fina niebla. Somos dos puntos en medio de esta soledad lunar,blanca y viva, limpia y misteriosa. Muy a lo lejos sabemos tú y yo dónde, del otro lado de la estepa, se encuentra un pequeño pueblo con casas de tejados rojos y puntiagudos. Y perros, Huskies, muy simpáticos.
El frío no nos toca, protegidos que estamos, tú con tu pelaje y yo con un buen abrigo de plumas. El aire que respiramos es fresco y puro, picante. Tus bigotes brillan y parecen hilos de plata alrededor de tu hocico húmedo y frío.
Somos dos puntos unidos en una blancura estrellada, en el fin del mundo.
En la punta del planeta estamos, en uno de los extremos de la tierra... Aquí no hay limites. Todo es espacio abierto. Tundras y desiertos...Osos blancos y fuertes. Y mares con sus focas y sus ballenas. Un poco más lejos, pero no tanto, el Canadá, de dónde venimos pero tambien otras tierras de bonitas consonancias: Groenlandia, Alaska, Islandia... y ciudades con nombres extraños, Inuvik, Doudnka, Karaoul, Mourmansk, Srednekolymsk...
Pronto se levantará el día que coloreará la cúpula gris de un amarillo pálido y lejano. Y luego llegará el sol y la luz del día crecerá lentamente. Entonces, bajo un cielo incandescente y rosado, podremos empezar a andar.
Aquí estamos, como promesa que nos hicimos. Me quito un guante y te acaricio la cabeza. Tú sigues mirando delante de tí, vigilando el levantar del día. Que suave es acariciarte de nuevo. Tu pelo negro brilla y resalta, eres mi oso polar, mi guardián, mi caballero del hielo. Eres un perro muy guapo. Como me gusta sentir de nuevo el palpitar de tu energía... El latir de tu corazón aqui, junto a mí, en medio de este paisaje limpido, edén de cristal y vidrio.
No me da miedo nada, ni la blancura, ni el vacío, ni la soledad. Pero esto sí, contigo.
Dos puntos en un lugar que podría ser el cielo.
Louise Driscoll
Estamos tú y yo en medio de una tierra espesa y blanca. Tú y yo en el Polo Norte.
Aquí, en esta inmensidad plateada, finalmente nos hemos vuelto a encontrar. Ah, cuanto tiempo amigo mío.
Firgoff..
Yo muchas veces te había dicho:
- Hasta en el Polo Norte me iría contigo.
Y tus ojos marrones oscuros siempre habían asentido. En el fondo, dónde fuese. Pero juntos. Hasta en el Polo Norte.
Mi buen perro Firgoff... Este mes hace un año justo que te has ido en esta otra dimensión, misteriosa e inaccesible, del otro lado de esta realidad nuestra, y esta dimensión tuya es la misma que hay en mi corazón.
Me has venido a visitar, amigo mío...
Te lo decía muchas veces, esto del Polo Norte. Era una frase secreta entre nosotros, una frase de complicidad, una especie de código. Reíamos en silencio.
Estamos solos...Y el viento del Norte está ausente... No hay ningún sonido aparte el respirar nuestro que se transforma en fina niebla. Somos dos puntos en medio de esta soledad lunar,blanca y viva, limpia y misteriosa. Muy a lo lejos sabemos tú y yo dónde, del otro lado de la estepa, se encuentra un pequeño pueblo con casas de tejados rojos y puntiagudos. Y perros, Huskies, muy simpáticos.
El frío no nos toca, protegidos que estamos, tú con tu pelaje y yo con un buen abrigo de plumas. El aire que respiramos es fresco y puro, picante. Tus bigotes brillan y parecen hilos de plata alrededor de tu hocico húmedo y frío.
Somos dos puntos unidos en una blancura estrellada, en el fin del mundo.
En la punta del planeta estamos, en uno de los extremos de la tierra... Aquí no hay limites. Todo es espacio abierto. Tundras y desiertos...Osos blancos y fuertes. Y mares con sus focas y sus ballenas. Un poco más lejos, pero no tanto, el Canadá, de dónde venimos pero tambien otras tierras de bonitas consonancias: Groenlandia, Alaska, Islandia... y ciudades con nombres extraños, Inuvik, Doudnka, Karaoul, Mourmansk, Srednekolymsk...
Pronto se levantará el día que coloreará la cúpula gris de un amarillo pálido y lejano. Y luego llegará el sol y la luz del día crecerá lentamente. Entonces, bajo un cielo incandescente y rosado, podremos empezar a andar.
Aquí estamos, como promesa que nos hicimos. Me quito un guante y te acaricio la cabeza. Tú sigues mirando delante de tí, vigilando el levantar del día. Que suave es acariciarte de nuevo. Tu pelo negro brilla y resalta, eres mi oso polar, mi guardián, mi caballero del hielo. Eres un perro muy guapo. Como me gusta sentir de nuevo el palpitar de tu energía... El latir de tu corazón aqui, junto a mí, en medio de este paisaje limpido, edén de cristal y vidrio.
No me da miedo nada, ni la blancura, ni el vacío, ni la soledad. Pero esto sí, contigo.
Dos puntos en un lugar que podría ser el cielo.
5 comentarios
Nike Shox Shoes -
llydia -
Un gran abrazo,
Ardi -
llydia -
Un abrazo,
Noctámbulo -
Pero poco a poco voy entrando en calor con la calidez de tus palabras. Disculpa que haya irrumpido sin pedirte permiso, pero lo has descrito de manera tan maravillosa que por un momento fueron tres los puntos en ese lugar que podría ser el cielo. Ahora me retiro y les devuelvo su intimidad, pero fue un placer haberla compartido, aunque fuera por un breve inistante. Un beso tronado.